Este martes se dieron a conocer en Ahora Magazine El Mercurio las novedosas ministras del gabinete de Sebastián Piñera. Y, alén de lo rubias que aparecían en la fotografía primordial -en las comunidades las llamaban «ministras danesas»-, brindaron su visión sobre múltiples temas, entre ellos las cuotas de género.
Virtudes de las cuotas de género
¿Marchan las cuotas? SÍ, en tanto que incrementan el número de mujeres que llenan cargos laborales en distintas contextos políticos, en países desarrollandose y en democracias mucho más afianzadas, como Italia o Suecia. Debido en parte a las cuotas, las mujeres en este momento llenan mucho más del 30 % de los escaños legislativos en América Latina y el Caribe, tal como en Europa y América del Norte. Además de esto, las cuotas tienen la posibilidad de ser realmente eficientes en el momento en que van acompañadas de mecanismos de cumplimiento y en el momento en que son obligatorias en vez de voluntarias.
Al tiempo, el encontronazo secundario de las cuotas en la representación de las mujeres en la política no está claro.
Por poner un ejemplo, la investigación en la India recomienda que las cuotas para los escaños de los municipios incrementan el liderazgo de las mujeres, dismuyen la discriminación y conducen a una mayor inversión en temas que preocupan a las mujeres, como el agua, el saneamiento, la educación y la salud. Los votantes en América Latina están escogiendo a mucho más mujeres como alcaldesas y concejalas, y mucho más mujeres están ascendiendo al gabinete de ministros ahora la presidencia (seis presidentes desde 1990). Las cuotas legislativas, y la mayor visibilidad de las mujeres en el ámbito nacional, tienen la posibilidad de estar prestando asistencia a eliminar varios de los viejos prejuicios.
Revocación de listas
La resolución de este CNE va en exactamente la misma dirección que las sugerencias brindadas por la MOE por medio de la investigación ‘Cuotas de Género y Justicia Electoral en Colombia’, donde la autoridad electoral Fue invitado a ofrecer interpretaciones y también llevar a cabo la ley de cuotas como una medida que busca asegurar la igualdad material, la igualdad de género y los derechos políticos de las mujeres, y no como un fácil requisito formal y procesal.
En consecuencia, el CNE responde a las afirmaciones de las organizaciones políticas sobre el cupo, considerándolo solo como un requisito formal.